lunes, 28 de septiembre de 2020

velo

Sabes, en la filosofía o por lo menos la que he estudiado y la que me ha apasionado, la belleza es verdad. La verdad está cubierta por un velo tensado y a veces contraído para usar tus palabras. De esta alegoría, aprendí que no hay belleza sin sinceridad, y que la sinceridad es oculta por el velo. Que únicamente hay verdad por el velo.

Yo muchas veces y casi siempre no sé leer entre líneas. Siempre he estado conmovido por tu sinceridad y tu manera de decirme las cosas, por cómo me haces cambiar de tema o evitar alguno. Por cómo me dejas sin argumentos, o por lo que nunca es dado a una respuesta. La conmoción es porque siento auténticas alusiones. Sucesiones de pensamientos siempre aguardando en hacerse visibles.

Eres lo más cercano a la alegoría que concibo como propia del arte. La belleza es verdad. Lo bello es de una sinceridad totalizante, porque es categórica y completa. Compleja y radical, en este caso no apela a un juicio sino a una característica de lo que permite lo vivo. Es que hay mucho que ver y sentir.

Mi cientĂ­fica, dĂ©jame quedarme mucho tiempo. DĂ©jame saber, que estamos juntos en esta longitud tensada y contraĂ­da por un medio. DĂ©jame acercarme al tiempo, es decir a ti. DĂ©jame pasar la noche con el sentido de querer concebir sin saber por quĂ©, para escribir, aprender la guitarra y que un efecto sea dedicarte canciones, retomar los lápices para que mis ilustraciones te enamoren. Como si la emociĂłn se manifestara por lo que mi cuerpo tiene, pero las palabras todavĂ­a no se han inventado, o debe ser que no las habĂ­a experimentado. Y sabes, ¿por quĂ©? Porque sencillamente, las palaras desaparecen cuando te veo. Todo lo que está en mi es lo que vez.

Creo que debo tratar de hacerlo concreto. Tu pasado es solo tuyo, el presente es la fortuna de esta vida en la que yo te conozco, el futuro, aunque complejo, e incierto, de interminables posiciones y detenidas concreciones, quiero recorrerlo a tu lado con lentitud, es decir, un presente genuino. Sabes, no quiero caminar de frente sin saber que estás presente; Caminar de lado sin sentir que me vas acompañando; o hacia atrás sin conocer de tu apoyo.

Mis pies puede que no avancen muy rápido, aunque mi actitud parezca acelerada.

Quiero aguardar el tiempo, volver siempre a ti. Como estos 70 días en los que empecé a escribir para saber de ti, y ahora no quiero dejar de hacerlo sin ti.

Snedy querida, quédate.

Con todo mi cariño, Tuyo

H[PG]

28 de septiembre de 2020

 

PD. ¿y si te dejarĂ­as querer?

0 comentarios:

Publicar un comentario